Se acerca el día

Después de casi mes y medio en castidad, mi Ama Diosa Tiffani me ha dicho que en breve me dejará eyacular.

Estoy en ese momento en el que por un lado me apetece poder hacerlo porque llevo muchos días sin tener un orgasmo, pero por otra parte no quiero, porque implica empezar la cuenta de 0, después de haber llegado tan lejos. 

Un momento en el que además disfruto más de mi placer. Me explico, hace tiempo que sé (y mi cuerpo ya lo ha asimilado) que los orgasmos no son míos, que no es como antes y que yo no decido cuando puedo tenerlos, eso sólo lo decide mi Ama. Y que los tendré ya no a diario como antes, ni semanales, y en alguna ocasión ni mensuales, hay meses, como este marzo reciente, que ha pasado en blanco, y ya estamos a mediados de abril, sino muy esporádicamente. Y he aprendido a disfrutar y estar saciado con los momentos de erecciones y excitación, momentos muy cortos, de menos de 5 minutos, para evitar seguir y ya no poder parar y romper mi castidad. Son momentos en los que me excito, me pongo un poquito mojado, y ya con eso me es suficiente.

Son momentos que también me sirven para que la castidad tenga un poquito de frustración por recordar que hay un final al que no debo llegar. Un final que cuando lo tengo, debo agradecer a mi Ama, por ser buena y permitírmelo. Que no sea una castidad tipo religiosa, sin estímulos. Esos momentos de excitación a veces los tengo cuando veo imágenes o vídeos o textos de Amas en twitter, y me sirven para sentirme bien, por ver imágenes Femdom y no aprovecharme de esas Amas, que libremente ofrecen sus aportaciones para difundir la Dominación Femenina o simplemente para compartir ideas o fantasías o experiencias o deseos suyos.

Además, cuando llevo ya mucho tiempo en castidad, como es ahora, mi pene reacciona con más rapidez que cuando hace poco tiempo que mi Ama me ha permitido eyacular. Mi pene está como ese perrito que está deseando que su Amo le baje a la calle. Mi pene se pone erecto en cuanto me toco los pezones, o veo algo excitante relacionado con la Dominación Femenina y me cuesta muy poquito ponerme húmedo, cosa que cuando hace poco tiempo que he eyaculado me cuesta más. Ahora puedo tener más momentos de este tipo, cuando estoy en el baño aprovecho y tengo mi ración de placer.

Al principio me costaba mucho quedarme saciado con ese poquito placer, sin el orgasmo, pero ya digo que con práctica ya he aprendido que esa es la única ración de placer al que tengo derecho, y no echo en falta el llegar al final.