Fantasía 3. Labial olvidado.

Estaba tomando un refresco en un bar. Había sido un día muy ajetreado, muchas gestiones, pero ya había podido solucionar lo que necesitaba, y me paré a descansar.

Estaba en mis cosas, mirando el móvil, y vi que en una mesa de delante se sentó un Mujer, de unos 50 años, guapa, pelo cuidado, con un vestido corto, azul, con unos estampados rojos, muy guapa.

Se sentó de tal manera que ella estaba justo delante de mi, pero ella para verme tenía que ladear su cabeza a la izquierda.

Pidió un café. Sacó su móvil (todos los que estamos solos en transporte, o en sitios parecidos acabamos mirando el móvil ¿dónde quedó lo de leer el periódico o un libro en los momentos de espera a solas?).

De repente me fijé que se soltó uno de sus zapatos, con una pequeña cuña, y dejó al aire su pie, enfundado en unas lindas medias, podía ver su talón, porque dejaba colgando el zapato en la puntera, balanceándolo y jugando con él.

La miré durante un rato, reconozco que me quedé embobado y al levantar la mirada vi que en ese momento ella me estaba mirando a mi, me había pillado. Me dio vergüenza, sobre todo por si ella pudiera notar que estaba teniendo una erección, que me había surgido imaginándome estando arrodillado a sus pies, acariciando y besándolos.

Ella y yo seguimos cada uno con nuestro móvil, aunque yo de vez en cuando miraba de reojo como ella continuaba jugando con su zapato.

Sacó un labial y empezó a retocarse los labios usando el móvil de espejo.

Pidió la cuenta y se marchó.

Al irse vi que se había dejado olvidado la barra de labios en la mesa. Menudo tesoro para un fetichista. Cogerlo no era un robo. Pagué rápido e hice lo posible para llevármelo de una forma disimulada.

Al salir a la calle oí una voz femenina a mi espalda.

- Sabía que lo ibas a coger, se te nota demasiado que te gustan loas cosas femeninas, desde el principio he visto que eres un hombrecito que puedes dar mucho juego a una Mujer fuerte y dominante como yo. Te lo puedes quedar, pero ¿quieres que tomemos una copa y nos conozcamos un poquito mejor?

- Si -dije balbuceando-

No esperaba eso, estaba nervioso, no sabía qué decir, pero tampoco me atrevía a llevarle la contraria. Y menos a una Mujer que es la que da el primer paso para en iniciar una relación, a mi se me da muy mal ligar, prefiero que sea ella la que lleve la iniciativa.