Inicios en nueva castidad

El sumiso vio que ella le mandaba un mensaje privado por aquella red social. Se puso nervioso. Deseaba verlo. Necesitaba verlo. Llevaban un tiempo mandándose ese tipo de mensajes, y cada vez iban subiendo más de tono.

- Veo que te faltan tortura de pezones. ¿por qué?
- Por nada. Las fotos con pinzas en los testículos son de un Ama que tuve, que me lo ordenó. ¿alguna idea? 
- Si, sabes esas perchas que hay para las faldas, que tienen pinzas. Estarías mono con una de esas perchas puesta en los pezones.

Eran propuestas que le lanzaba ella, luego, con el tiempo, pasaron a ser órdenes. Aunque el sumiso desde el principio se las tomó como órdenes. Deseaba obedecer a aquella Mujer. Y pasados unos días colgó la foto con la percha en los pezones.

Se habían conocido por una red social, pero el sumiso vio que ella también tenía perfil en esta otra Red social BDSM, más privada, donde él había colgado hace tiempo unas fotos. Ella no tenía el rol definido de Ama, era más bien sumisa, pero al sumiso le pareció desde el principio que ella lo hacia fenomenal. Ella empezó como un juego, pero poco a poco se fue metiendo en el papel de Ama. Además, su experiencia como sumisa seguro que le servía para aplicarla desde el otro lado de la fusta.

Los 2 tenían claro que aquella relación nunca pasaría de virtual a presencial. Vivían muy distantes, y otras circunstancias también lo impedían, pero a los dos se les veía disfrutando y deseando avanzar en aquella relación que empezó por casualidad, cuando a través de otra Mujer dominante, el Ama pidió ayuda para crear un blog. El sumiso se ofreció sin buscar ninguna intención oculta. Su única intención era facilitar que una Mujer tuviera un espacio desde el que dar sus ideas, sus opiniones, compartir sus fantasías... 

El sumiso siempre había sido de la opinión de que las Amas deben decir a los sumisos lo que ellas quieren que los sumisos hagan, cómo quieren que se comporten. La Dominación Femenina no debe ser que ellas lleven a cabo los deseos de los sumisos, los sumisos necesitan que ellas les guíen, los sumisos somos algo torpes, y para eso es necesario que ellas tengan el máximo número de espacios desde los que difundir sus ideas, y entre ellas mismas también poder intercambiar opiniones o darse consejos entre ellas y aconsejar a las Mujeres que aparecieran por allí deseando descubrir la Dominación Femenina.

El sumiso había tenido antes una relación virtual con otra Ama, la cual le había enseñado mucho, y a la que el sumiso le estaba muy agradecido, pero esa relación terminó. Y el sumiso, después de haber estado dominado por ese Ama, estaba perdido, y necesitaba poder volver a sentir el ser controlado, el ser humillado, el ser dominado, el saber que su polla era de otra Ama, en definitiva, esa relación le había marcado por dentro y le había hecho necesitar volver a estar bajo las órdenes de una Mujer.  

Poco a poco el intercambio de mensajes fue pasando de unos pocos a la semana, a uno al día, o a varios al día. Hasta que llegaron al punto de necesitar los 2 hablarse a diario, de saludarse cada vez que alguno entraba en twitter, por si el otro estaba conectado, y poder intercambiar aunque fueran unas pocas frases. Fueron diciéndose alguna preocupación o hecho muy personal, dentro del anonimato y la privacidad que ambos buscaban en twitter. Deseándose buenos días, buenas noches, y poco a poco esas conversaciones fueron tratando de temas más "genitales, dominantes y pasionales".



No todo fue fácil. El Ama en un momento dado le dio una orden al sumiso, y a los pocos días el sumiso no lo había cumplido. Ella se enfadó, con razón, ellas siempre se enfadan con razón. Le dijo que sólo cumplía las órdenes que a él le apetecían, y que a ella ese tipo de sumisos no le gustaban, que el sumiso debe ganarse su puesto. El sumiso le aclaró el motivo del retraso. Hablaron, Se entendieron y la relación retomó de nuevo.

La castidad fue de lo primero que hablaron. Ella deseaba tenerle sin orgasmos un tiempo, verle sufrir y él necesitaba una Ama que le dijera que no los podía tener. Un Ama que de vez en cuando le recordara que ella no le dejaba, eso solo le bastaba al sumiso para cumplir la castidad. Él solo no era capaz, se dejaba llevar. Pero teniendo Ama le era más fácil mantener la castidad, aunque fuera a distancia, y sin cinturón de castidad. Ese compromiso para él era sagrado, no se atrevería a tocarse sin permiso, y por experiencia con el Ama anterior, si se hubiera tocado habría ido corriendo a confesar su error. Y el llevar ya un tiempo en castidad le había ayudado a conocer su cuerpo, sus reacciones, y qué cosas no hacer para acabar teniendo un orgasmo no autorizado. Y también le había dado más margen para tocarse y llegar más cerca de puntos sin retorno, pero siendo capaz de parar. La castidad había aumentado su autocontrol.

Y el Ama, sabiendo que el sumiso no era nuevo en esto de la castidad, quería que el sumiso avanzara. Le pondría listones más altos, dado que el sumiso no partía de cero. Le hacia comentarios morbosos para excitarle y dejarle cachondo. O le guiaba por mensajes privados en una lenta y gozosa masturbación llevándole al límite, pero sin dejar que se pudiera correr. O le impedía que se tocara los pezones, que era la forma que el sumiso había encontrado para superar sus frustraciones por la castidad. Esa era una nueva fase de castidad para él, ya no podía ni liberar sus tensiones tocándose los pezones. Los huevos empezaban a dolerle por la acumulación de semen. Pero él aceptaba que su Ama le llevara por nuevos sitios, que le sacara de su "zona de confort", como dicen los psicólogos, que el Ama buscara que el sumiso no se acomodara, plantearle retos.

Dentro del deseo del sumiso de no ser él el que dirija la relación, que debe ser el Ama la que plantee las cosas, las prácticas y las fantasías, pero entendía que la castidad del sumiso es algo básico de una relación Femdom. El sumiso encuentra placer en ser castigado en sus nalgas, en ser humillado, pero ese placer, si acaba eyaculando, en el fondo no es nada Femdom, él lo ha pasado bien. Por eso, al menos para él, es más castigo quedarse caliente y cachondo sin eyacular, que unos azotes en el culo. Y además pensaba que así el sumiso demuestra que se esfuerza por su Ama y que no está con ella para excitarse y correrse a costa suya, que podría ser interpretado como una falta de respeto hacia su Ama. Y que no está con ella pensando en su placer egoísta, sino que está con ella pensando sobre todo en el placer y el disfrute de ella. No quería volver a la época en la que se masturbaba viendo vídeos de Amas y sumisos. El sumiso entendía que eso era una contradicción, decir que quieres ser dominado por una Mujer pero solo pensar en correrte. 

Ella le pidió que esto lo plasmara en su blog. Y el sumiso obedeció, sin dudar, sin costarle, le gustaba escribir y le gustaba la castidad. Además estando con las manos y la mente ocupadas escribiendo, se aseguraba no caer en tentaciones de romper su castidad. 

Se planteó escribir esa entrada de una forma personal. No quería que fuera una mera recopilación de hechos consecutivos, eso era muy frío. Prefería incluir sentimientos, pensamientos, porque además de esa manera el Ama podría ir conociendo sus fantasías, sus temores, sus miedos, para que ella le fuera dominando de forma física, impidiéndole que eyaculara y dejándole caliente y frustrado o dándole órdenes para que se aplicara castigos, o humillándole, pero para que también le fuera dominando de una forma mental. 

Empezó a escribir:
" El sumiso vio que ella le mandaba un mensaje privado...  



Comentarios

  1. Es estupenda l lectura, quiero recibir las publicaciones recientes. Kalichapad@gmail.com
    Gracias

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